
Juan Carlos Merino Sanz
Farmacéutico y Educador terapéutico en diabetes
La intervención del farmacéutico ayudando en el control de los factores de riesgo cardiovascular (diabetes, hipertensión arterial, colesterol alto, obesidad, etc.) resulta clave tanto en la prevención como en el seguimiento de las enfermedades cardiovasculares (ECV)
Autor de varios cursos
El farmacéutico aporta conocimientos y habilidades específicas que elevan la calidad de vida del paciente al ganar en motivación, confianza y compromiso en la mejora de “su” enfermedad.
Fomenta la modificación de hábitos saludables de manera personalizada, asesora en el uso adecuado de la medicación evitando la aparición de posibles efectos adversos y detecta precozmente síntomas o posibles descompensaciones ante las que derivar al médico para su rápido diagnóstico.
Colaborador articulista

Un ejemplo muy cercano lo he vivido con mi madre. Fue diagnosticada de diabetes tipo 2 hace más de veinticinco años coincidiendo con la menopausia. Desde hace unos diez años tiene diagnosticada Retinopatía diabética.
Puedo aseguraros que no ha sido indolente con su tratamiento. La aparición de esta complicación vino ocasionada principalmente por la falta de información.
Tuvo un desconocimiento parcial de la enfermedad, de su tratamiento y de la multitud de factores que hay que tener en cuenta para su mejor control.
El problema que encontró mi madre y que hoy en día, sigue estando vigente, es la falta de tiempo que tienen los profesionales sanitarios para explicar al paciente, de manera personalizada, como optimizar su tratamiento.
Buscar un nombre para este proyecto educativo fue relativamente sencillo. Las dudas iniciales fueron fácilmente resueltas al acordarme de mi madre, su nombre y su diabetes, porque aún no os he comentado que mi madre se llama Esperanza.